martes, 2 de mayo de 2017

JOSE LUZURIAGA
VARIEDADES LINGÜÍSTICAS

Las variedades de la lengua son las diferentes formas de expresarse que tienen las personas (ya que se habla de diferente manera según el lugar donde vives, según la persona que habla, la profesión …)

TIPOS DE VARIEDADES

Variedades geográficas.
Son las variedades que tiene la lengua según las diferentes regiones (o incluso provincias y zonas). Es decir, son los dialectos.
Variedades sociales
Son las variedades del lenguaje que vienen determinada por el nivel socio-cultural de los hablantes, la edad, el sexo etc. Estas variedades dan lugar a cuatro niveles de uso de la lengua, que son los siguientes: 
NIVEL ESTÁNDAR
Es el uso de la lengua habitual, en todos los hablantes (se trata de un uso correcto, aunque no tan riguroso como el nivel culto).
NIVEL POPULAR
Es el uso de la lengua propio de la mayoría de los hablantes, que tienen un nivel medio de instrucción.
NIVEL CULTO
Es el uso de la lengua que utilizan las personas con gran instrucción. Es un uso muy cuidado.
NIVEL VULGAR
Es propio de las personas poco instruidas, que cometen incorrecciones y alteran la norma.
Dentro del nivel popular o coloquial, las jergas forman un grupo especial.
Un tipo especial de jerga lo forman los argots, propios de grupos marginales (presidiarios, traficantes de droga …) que crean su propio lenguaje con el fin de que no los entiendan las personas que no forman parte de ese grupo.
Las variedades estilísticas
Son las variedades del lenguaje que vienen determinadas por la intención del hablante de escoger una determinada forma de lenguajes. Estas variedades dan lugar a los registros. Hay muchas variedades estilísticas, pero podemos distinguir dos variedades fundamentales: 



         



Resultado de imagen para variedades linguisticas



jueves, 20 de abril de 2017

ALEXANDER IZA
METAPLASMO


-Es conocido como metaplasmo un fenómeno lingüístico que produce cambios en la estructura de las palabras, sobre todo en el lenguaje hablado, afectando también al lenguaje escrito.
Resultado de imagen para metaplasmo

Según su etimología, metaplasmo deriva del griego (meta) que se traduce en más allá y (plasmos) (plasmar o formar), quedando en más allá de la formación o más allá de las palabras. Donde se le quitan, cambian o agregan letras a una sílaba dentro de una palabra.

Se sabe que estos fenómenos  se producen en la evolución de las lenguas, y aún hoy en día se sigue produciendo, principalmente por el uso cotidiano, donde se forman el caló, lunfardo y dialectos similares, donde predominan los barbarismos y extranjerismos de la lengua.
Para su comprensión se han dividido en tres tipos de metaplasmos los cuales tienen subdivisiones o subcategorías:
1.- Agregar o adición (agregar letras)
  • Epéntesis
  • Paragoge
  • Prótesis
2.- Cambiar o supresión (substituir letras)
  • Aféresis
  • Apócope
  • Haplología
  • Síncopa
3.- Quitar o transponer (suprimir o cambiar de lugar letras)
  • Matátesis
  • Eufonía
  • Rotacismo
  • Anaptixis

Ejemplos de metaplasmo por adición:

a) Epéntesis: (se agrega una letra o sílaba al inicio)
  • Endenantes = antes
  • por = por
b) Paragoge: (se agrega una sílaba o una letra al final de la palabra)
  • Cambear = Cambiar
  • Copear = Copiar
  • Espúreo = Espurio
  • Vacear = Vaciar
  • Varear = Variar
  • Abogada = Abogado (La abogado ya aceptado la abogada)
  • Magistrada = Magistrado (Correcto la Juez)
  • Jueza = Juez (Correcto la Juez)
  • Medica = Medico (correcto la médico)
  • Fuistes = Fuiste
  • Comistes = comiste
c) Prótesis: (Se agregan letras o sílabas al inicio de las palabras)
  • Envirutillar = virutilla
  • Aplanchar = Planchar o plano
  • Asolapado = Solapado
  • Andenantes = Antes
  • Meope = Miope
  • Veniste = Viniste

Ejemplos de metaplasmo por supresión:

a) Aféresis: (Se quita una letra o sílaba al inicio de una palabra)
  • Hermano = mano
  • Papá = Má
  • Mamá = Má
  • Guadalupe = Lúpe
b) Apócope: (Se quita una letra o sílaba al final)
  • Grande = gran
  • Santo = San
  • Bicicleta = bici
  • Profesor = profe
  • Computadora = compu
c) Haplología: (esta consiste en la eliminación de una palabra, o de una sílaba parecida o semenate a la siguiente)
  • Paralepípedo =  paralelepípedo
  • Idololatres = dio idólatra

Ejemplos de metaplasmo por transposición:

a) Metátesis: (En esta se cambian de posición )
  • Naide = Nadie
  • Humareda = Humareda
b) Eufonía: (es mucho más raro y se cambian los fonemas queriendo que suene mejor)
  • Carmen = Canimen
c) Rotacismo: Consiste en que en la conformación interna de la palabra la “S”  Intervocálica es transformada en “R”
  • Feria
  • Flora
d) Anaptixis (Conversión de consonantes en vocales)
  • Inglaterra = Ingalaterra

martes, 18 de abril de 2017

KEVIN OÑA



José de la Cuadra
(Guayaquil, 1903-1941) Escritor ecuatoriano cuyos cuentos figuran entre los más importantes de la narrativa de su país. Formó parte del Grupo de Guayaquil o Grupo de los Cinco, acaso el más significativo movimiento del siglo XX para la evolución de la prosa en Ecuador.
Cursó los estudios de derecho y fue profesor de la Universidad en su ciudad natal; ocupó luego un alto cargo en la administración pública (1939). Sus ideas socialistas lo inclinaron hacia una literatura de fondo social, de realismo dramático, en estilo cuidado y musicalmente vigoroso.
Resultado de imagen para jose de la cuadra
En la narración breve se encuentran sus mejores logros; uno de ellos es Banda del pueblo, incluido en su colección Horno (1932). Otros libros suyos de cuentos son Repisas (1931), El amor que dormía (1930) y Guásinton: historia de un lagarto montuvio (1938). En la recopilación El amor que dormía reunió cuentos publicados ya anteriormente: el que da título al libro (1926), Madrecita falsa (1923), La vuelta de la locura (1926), Incomprensión (1926) y El maestro de escuela (1929).
Como sus compañeros, José de la Cuadra mantuvo siempre un compromiso abierto con la sociedad. Militante de la cultura popular, sus relatos intentan de diversas maneras acercarse a la "naturaleza" misma del hombre común (Guásinton, 1938). Esta búsqueda pasaría por la redacción de la novela Los Sangurimas, en 1934. La obra presenta la historia de una familia campesina costeña que vive bajo su propia lógica patriarcal de comunidad cerrada, dominada por relaciones incestuosas en medio de un clima asfixiante de violencia, que genera un lugar inestable en términos de modernidad, justicia y civilización.
El relato, bajo la forma de una saga familiar que combina la experiencia de lo mágico y de lo mítico, avanza hacia la destrucción de la comunidad montuvia en un clima determinado por la locura del principal mandamás de la comarca. Este relato, según el crítico francés Jacques Gilard, probaría que el universo mítico de Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, y lo que posteriormente se denominaría realismo mágico, tenía antecedentes ilustres en la tradición narrativa latinoamericana.

La crítica coincide en reconocerlo, además, como el intérprete del campesino de la costa, tema que inspiró su ensayo El montuvio ecuatoriano (1937). La temprana muerte de este gran narrador ecuatoriano cortó la carrera del que pudo llegar a ser una de las primeras figuras literarias de Hispanoamérica.

domingo, 16 de abril de 2017

JOSE LUZURIAGA


Rubén Darío

(Metapa, 1867 - León, 1916) Seudónimo del gran poeta nicaragüense Félix Rubén García Sarmiento, iniciador y máximo representante del Modernismo hispanoamericano. Su familia era conocida por el apellido de un abuelo, "la familia de los Darío", y el joven poeta, en busca de eufonía, adoptó la fórmula "Rubén Darío" como nombre literario de batalla.

Rubén Darío
Con una dichosa facilidad para el ritmo y la rima creció Rubén Darío en medio de turbulentas desavenencias familiares, tutelado por solícitos parientes y dibujando con palabras en su fuero interno sueños exóticos, memorables heroísmos y tempestades sublimes. Pero ya en su época toda esa parafernalia de prestigiosos tópicos románticos comenzaba a desgastarse y se ofrecía a la imaginación de los poetas como las armas inútiles que se conservan en una panoplia de terciopelo ajado.
Rubén Darío estaba llamado a revolucionar rítmicamente el verso castellano, pero también a poblar el mundo literario de nuevas fantasías, de ilusorios cisnes, de inevitables celajes, de canguros y tigres de bengala conviviendo en el mismo paisaje imposible. Trajo a un idioma que estaba en tiempos de decadencia el influjo revitalizador americano y los modelos parnasianos y simbolistas franceses, abriéndolo a un léxico rico y extraño, a una nueva flexibilidad y musicalidad en el verso y la prosa, e introdujo temas y motivos universales, exóticos y autóctonos, que excitaban la imaginación y la facultad de analogías.
En brillantez formal, estilística y musical, apenas hay poeta en lengua española que iguale al Darío de la primera etapa, la etapa plenamente modernista de Azul (1888) y Prosas Profanas (1896). Cuando se aminora su esteticismo, y el ideal del arte por el arte deja lugar a nuevas inquietudes, surge su obra maestra, Cantos de vida y esperanza (1905), en la que el absoluto dominio de la forma ya no tiene la mera belleza como único objetivo, sino que sirve a la expresión de una intimidad angustiada o de preocupaciones sociohistóricas, como el devenir de la América hispana.
Al valor poético intrínseco de esa segunda etapa, más perdurable que el de la primera, hay que sumar el papel de Rubén Darío como núcleo originario y aglutinador de todo un movimiento, el Modernismo, que marcó un hito en la historia de la literatura: tras seguir sumisamente durante tres siglos los rumbos de las letras europeas, nace en América una corriente literaria propia cuya influencia pasará incluso a la metrópoli. Conseguida a principios del XIX la independencia política, Latinoamérica lograba, a finales del mismo siglo, la independencia literaria.

martes, 4 de abril de 2017

ALEXANDER IZA

José de Espronceda

Imagen relacionada
(Almendralejo, España, 1808 - Madrid, 1842) Poeta español. Hijo de una familia hidalga de fuerte raigambre militar, estudió con Alberto Lista, de quien se convirtió en aventajado discípulo. Desde muy joven se sintió atraído por la literatura y por la actividad política, aficiones ambas que definirían su carrera futura. En 1823, y a raíz de la ejecución del general Riego, fundó, junto a Patricio de la Escosura, una sociedad secreta en pro de la libertad cuyos jóvenes miembros se hacían llamar los Numantinos. La represión política que siguió al trienio liberal motivó su encierro en un convento de Guadalajara, donde emprendió la redacción de Don Pelayo, poema épico de corte neoclásico que dejó inacabado.




Tras recobrar la libertad, regresó a Madrid, pero los acontecimientos políticos del país lo impulsaron a marchar al extranjero. Partió hacia Gibraltar, y de allí pasó a Lisboa, de donde fue expulsado, por lo que hubo de refugiarse en Londres, por aquel entonces punto de reunión de los liberales españoles, en cuyas reuniones participó. En Londres conoció a Teresa Mancha, con quien mantuvo una accidentada relación sentimental. Informado de los acontecimientos revolucionarios que se producían en julio de 1830 en París, allí acudió para participar y, poco después, formó parte de la frustrada expedición liberal del coronel Chapalangarra que intentó entrar en España.
Durante su ausencia de Londres, su antigua amante, Teresa, había contraído matrimonio con un comerciante, por lo que ambos decidieron fugarse juntos. Tras otra breve estancia en París, en 1833 regresaron a España, donde Espronceda ingresó en el cuerpo de la Guardia Real. Sus inquietudes políticas, sin embargo, le valieron un destierro en Cuéllar, en 1834, y posteriormente el traslado a Badajoz. También debió esconderse tras la llegada al poder de Toreno, contra cuyo gobierno se rebeló.
Durante sus breves etapas en Madrid, participó activamente en la vida literaria de la capital y a pesar de sus frecuentes encarcelamientos y destierros pudo escribir sus primeras obras. El contacto con la poesía romántica europea (Byron, Scott) influyó en él poderosamente y orientó su propia producción poética hacia un romanticismo exaltado, pletórico de ritmo, color y fantasía. En 1834 publicó Sancho Saldaña, una novela histórica, y por las mismas fechas escribió varias comedias y el drama histórico Blanca de Borbón, editado póstumamente.


lunes, 3 de abril de 2017

JOSTIN CHULCA


Medardo Ángel Silva

(Guayaquil, 1899-1919) Poeta ecuatoriano. De formación realmente autodidacta y origen humilde, ejerció como maestro de escuela; quizá su condición de mulato influyó en el pesimismo que llenó su vida, en una sociedad todavía lejana del sentimiento humano de la comprensión y la convivencia. No se ha podido concretar si lo impulsó al suicidio un desengaño amoroso o si murió a manos de un rival por celos.
La obra de Silva se contiene en dos volúmenes: El Árbol del Bien y del Mal, que él mismo editara en 1917, y Poesías escogidas, una selección que Gonzalo Zaldumbide publicó en 1926, en París. Silva era el menor, y acaso el más importante poeta de la generación del novecientos que introdujo el modernismo en la literatura ecuatoriana. Medardo Ángel Silva, de origen humilde, padeció el "mal del tedio", y toda su obra, de gran pureza formal, es un canto de amor a la muerte.
Poeta del dolor, del "spleen", del amor imposible, del hastío de vivir, ha dejado algunas de las más bellas páginas de la literatura ecuatoriana. Estuvo, como sus compañeros de generación (Arturo Borja, Humberto Fierro, Ernesto Noboa y Caamaño) bajo la influencia directa de los simbolistas franceses, especialmente de Verlaine y Baudelaire. Era un adolescente cuando escribió "Libro de Amor", "Las Voces Inefables", "Estancias", "Estampas Románticas". Es también autor de prosas poéticas y de una pequeña novela titulada María Jesús.